El networking, intercambio (bilateral) de investigadores y la búsqueda de socios en la industria caracterizan el trabajo del Chile Clúster. Foto: KIT

El KIT quería a Chile como socio estratégico, y para Chile las ventajas son evidentes: el clúster significa acceso a investigación de clase mundial, intercambio de investigadores y transferencia de conocimiento", señala Fredy Ríos. "Y eso nos ayuda, finalmente, a generar innovación para Chile", dice el ingeniero en informática doctorado en algoritmos inspirados en la naturaleza y su optimización, quien trabaja en el KIT como coordinador científico del KIT Chile Cluster.

El clúster fue lanzado en 2015 y ahora cuenta con la participación de 45 investigadores y nueve universidades chilenas, tres de las cuales son miembros fundadores: la Universidad de Chile (Uch), la Universidad de Concepción (UdeC) y la Universidad Austral de Chile (UACh) en Valdivia. Asimismo, el KIT pone a disposición sus estructuras, su apoyo administrativo y logístico.

El Instituto de Tecnología de Karlsruhe pertenece a los 100 mejores universidades del mundo y es el alma mater de seis premio nobels. Foto: KIT

Incluso antes de 2015 había numerosas conexiones y proyectos de investigación individuales germano-chileno entre Karlsruhe y Chile. "El objetivo era y sigue siendo coordinar y sistematizar todo esto y formalizarlo", explica Ríos. La cooperación le da a Chile acceso a costosas alternativas de financiamiento adicionales de alta tecnología y expande su red de cooperación científica. Para los científicos del KIT las ventajas son claras: acceso a los enormes "laboratorios naturales" de la geografía chilena, presentación de sus ideas ante investigadores de punta y la oportunidad de desarrollar proyectos conjuntos en un entorno nuevo e innovador.

El primer proyecto concreto de esta red se denomina "Instituto Virtual para el Desarrollo Eco-Industrial" y funciona desde noviembre de 2017. Éste fue financiado por el Ministerio Federal de Educación e Investigación (BMBF) con 300.000 euros en su fase inicial. El próximo año y luego de una evaluación intermedia se prevén otros 600.000 euros destinados a una fase de consolidación de tres años. "Somos conscientes de que estamos operando en un entorno extremadamente competitivo, por lo que nos gustaría mostrar lo relevante y prometedor que es nuestro proyecto y, así poder obtener fondos de seguimiento del BMBF", dijo Fredy Ríos.

Los proyectos del IEDE se centran en el uso sustentable del agua y la energía en un contexto urbano, la transformación sustentable de materiales y energía en el uso de la biomasa, el uso eco-industrial de los recursos del subsuelo y el suministro descentralizado de energía para el desarrollo sostenible de la región. Las ideas y proyectos se basan en el ideal de la economía circular.

Uno de los principales objetivos del clúster es acercar, más que nunca, la ciencia y la industria en Chile, es decir, fortalecer la investigación aplicada y "desarrollar soluciones para problemas industriales concretos de manera interdisciplinaria e internacional", grafica Fredy Ríos. Para cada proyecto en específico también se deben encontrar socios adecuados. Especialmente, los programas de estudio, el intercambio de investigadores y la supervisión de estudiantes de doctorado se encuentran entre los temas del clúster.

"Nuestra tarea actual es definir el futuro del grupo y asegurar su continuo financiamiento", dijo Ríos. "Nos esforzamos por conseguir un financiamiento sostenible que permita que el clúster se autofinancie". Los contactos con la industria y especialmente con las asociaciones empresariales chilenas son parte de la estrategia. El KIT Chile Cluster y el equipo de proyectos del IEDE en KIT está formado por el Prof. Dr. Andreas Braun como director de ambos proyectos, el Dr. Fredy Ríos como coordinador científico y la Sra. Irma Mantilla, coordinadora administrativa.

Berlín, 11 de diciembre de 2018.